La crisis alimentaria, generada
por especulación capitalista amenaza a la vida y el desarrollo del ser humano a
nivel mundial
La crisis alimentaria amenazará
la vida y el desarrollo de 450 millones de niños en todo el mundo durante los
próximos 15 años, según expone el informe de Save the Children "Una vida
sin hambre: cómo combatir la desnutrición infantil".
La organización de defensa de la
infancia recuerda que cada hora 300 menores pierden la vida por desnutrición,
que es causa subyacente de más de un tercio de las muertes infantiles en todo
el mundo: 2,6 millones al año, de un total de 7,6 millones.
Denuncia que los avances en la
reducción de la desnutrición han sido muy lentos en los últimos 20 años y que
la combinación del cambio climático, la inestabilidad del precio de los
alimentos, la inseguridad económica y los cambios demográficos los están
ralentizando aún más.
Además, plantea que el hecho de
que la desnutrición no se registre en los certificados de defunción contribuye
a que no se combata de forma eficaz.
Save the Children explica que
para los niños que sobreviven la desnutrición a largo plazo provoca daños
devastadores e irreversibles.
La falta de alimentos nutritivos,
sumado a las infecciones y enfermedades, provocan que sus cerebros no se
desarrollen adecuadamente.
"Al menos 170 millones de
niños y niñas en todo el mundo padecen un retraso en su crecimiento a causa de
la desnutrición. Esto implica no sólo que su estatura sea menor que la media,
sino también que pierdan cursos escolares y que rindan menos
académicamente", indica.
Según la responsable de programas
internacionales de Save the Children, Lucía Losoviz, "este año es clave
para lograr que todos los niños reciban la nutrición que necesitan y poner fin
a la crisis de desnutrición a nivel global".
Los suplementos nutricionales y el impulso de hábitos saludables,
como el lavado de manos o la lactancia materna, podrían prevenir la muerte de
casi dos millones de menores de cinco años y muchas enfermedades si llegase a la
población infantil de los 36 países donde vive el 90 ciento de los niños con
desnutrición, advierte la organización.
El informe incluye algunos
testimonios para poner rostro a estas situaciones, como el de Maritu, una niña
etíope de nueve años, que aparenta menos edad de la que tiene.
"Hoy he comido un pequeño
trozo de injera -pan sin levadura que se sirve con una salsa básica- para
desayunar. Lo hemos compartido entre cuatro personas. No comemos nada más. Una
vez al año, en ocasiones especiales, es posible que coma huevos o carne. No hay
suficientes alimentos, pero mis padres me dan lo que hay disponible. A veces me
da hambre en la escuela", dice la niña, cuyo crecimiento se ha visto afectado
por una dieta pobre en nutrientes.
(Fuente: kaosenlared)